23.06.2021 | Tendencias del sector químico
Tipos de conservantes cosméticos: ¿qué debes saber sobre ellos?
Con tal de prevenir el deterioro de los cosméticos y proteger al consumidor, generalmente se les añaden conservantes con los que se evita que sean contaminados por microorganismos. Los conservantes cosméticos son sustancias químicas con actividad microbiana y son necesarios para mantener la calidad y las propiedades del producto y para garantizar que su uso es seguro durante toda su vida útil.
Ten en cuenta que los productos cosméticos proporcionan a los microorganismos muchos de los nutrientes que necesitan para crecer y reproducirse, como carbohidratos, minerales y vitaminas. Además, los conservantes cosméticos son especialmente necesarios en todos los productos que incluyen agua en su fórmula, ya que esto crea un medio ideal para las bacterias, hongos y mohos.
Características de los conservantes cosméticos
Elegir el mejor conservante para cosmética puede ser complicado porque el formulador deberá tener muchos criterios en cuenta, incluyendo el tipo de consumidor al que va dirigido el producto (especialmente importante cuando se trata de cosmética infantil) y la parte del cuerpo en la que se va a usar.
Como hemos visto, son muchos los microorganismos capaces de contaminar un producto. Por eso es recomendable utilizar conservantes cosméticos de amplio espectro, es decir, aquellos que actúan al mismo tiempo contra bacterias, mohos y levaduras. Además, el conservante utilizado debe ser eficaz a concentraciones muy bajas (entre un 0,0005 % y un 1 %). De este modo, se reducirán las posibilidades de irritar la piel o incluso producir una reacción alérgica.
Por supuesto, los formuladores deben asegurarse de que el conservante utilizado está aprobado y es compatible con todos los ingredientes utilizados en el producto en cuestión, incluyendo el envase en el que se almacena. Para ello los organismos competentes hacen un importante trabajo previo sometiendo a los conservantes a rigurosas evaluaciones y controles de calidad con las que garantizan su seguridad.
El conservante también tiene que ser estable durante toda su vida útil, desde la fabricación y el almacenamiento a su uso habitual por el consumidor, y soportar diferentes condiciones de pH, humedad y temperatura.
Además, un buen conservante cosmético no alterará las características organolépticas del producto, así como el pH que deseamos en el producto final. Todo esto manteniendo un precio asequible, que no dispare el coste de la fórmula. Como ves, todo un reto para los formuladores.
Por otro lado, no son únicamente los conservantes cosméticos los que contribuyen a mantener la calidad del producto, sino que todos los elementos (materias primas, buenas prácticas de fabricación, tipo de envase…) actúan en conjunto para que los microorganismos no contaminen el producto. A esta combinación de componentes la conocemos como sistema conservante.
Lista de conservantes cosméticos permitidos
El uso de conservantes cosméticos está sujeto a una regulación estricta cuyo principal objetivo es la seguridad del consumidor. El Anexo V del Reglamento 1223:2009 de la Unión Europea recoge la lista de conservantes cosméticos permitidos y especifica su concentración máxima y productos en los que se pueden utilizar, así como cualquier otra condición necesaria.
Tipos de conservantes cosméticos
Hay diversos tipos de conservantes cosméticos. Algunos de los más extendidos son:
- Ácidos orgánicos y derivados: de entre ellos los más utilizados son sin duda los parabenos, ésteres del ácido para-hidroxibenzoico (PHBA) que ya han demostrado su eficacia y seguridad. Otros ácidos ampliamente usados como conservantes cosméticos son el ácido benzoico, el ácido sórbico y el ácido dehidroacético, así como sus sales. Para evitar la contaminación por microorganismos, alteran el potencial eléctrico de la membrana celular y su permeabilidad.
- Alcoholes y derivados: estos tipos de conservantes cosméticos actúan sobre los lípidos y las proteínas de las membranas celulares, de modo que provocan un daño que interfiere en los procesos de transporte y metabolismo de la célula. Además, también desnaturalizan proteínas. Los derivados fenólicos como el fenoxietanol son algunos de los alcoholes más utilizados como conservantes cosméticos.
Puede que también te encuentres con los antioxidantes como un tipo de conservantes cosméticos, pero en realidad estos ingredientes evitan la oxidación, que puede alterar las características del producto, no su contaminación por microorganismos. Por lo tanto, no es correcto incluirlos en las clasificaciones de los conservantes.
Tampoco deben confundirse con los biocidas. La función de estos últimos es descontaminar un producto en el que ya se han desarrollado los microorganismos mientras que la acción de los conservantes es proteger a los productos antes de se produzca dicha contaminación.
Conservantes naturales para cosméticos
No hay duda de que la cosmética natural es tendencia, lo que lleva a que muchas personas demanden conservantes de origen natural. Algunos de los tipos de conservantes más utilizados en cosmética natural son los ácidos orgánicos y sus sales, que en muchas ocasiones se acompañan con aceites esenciales, perfumes y polialcoholes. Por lo general, se requieren cantidades elevadas de este tipo de conservantes para que sean efectivos. Por eso son más proclives a causar reacciones alérgicas y ser irritantes.
Cosmética sin conservantes
En respuesta a la demanda del consumidor, también encontramos productos cosméticos sin conservantes. Este claim realmente significa que no contiene ninguno de los conservantes identificados en el Anexo V.
Para reducir o incluso evitar el uso de conservantes cosméticos es posible aprovechar las propiedades antimicrobianas de algunos ingredientes que, a pesar de ellas, no aparecen en la lista de conservantes cosméticos. Además, algunas características del producto, como un bajo contenido en agua o un pH extremo también ayudan a evitar la contaminación microbiológica.
Estos productos deben cumplir estrictas exigencias de esterilidad durante su vida útil. Por esa razón, es muy importante el tipo de envasado y se suelen utilizar envases de un solo uso o que eviten el contacto del producto con el entorno y con el usuario, como los sistemas airless.
Independientemente del reclamo del producto, ya sea cosmética natural, bio o “sin conservantes”, todos los cosméticos deben estar adecuadamente conservados y someterse a ensayos que garanticen su uso seguro. En Zschimmer & Schwarz ofrecemos ingredientes para química cosmética con diferentes sistemas de conservantes e incluso contamos con referencias aptas para el claim sin conservantes, el certificado COSMOS o RSPO. De este modo, nos adaptamos a las necesidades del cliente, proporcionando siempre la solución más adecuada para cada caso particular y asegurando la protección del consumidor.