¿Qué es un agente defloculante y para qué se utiliza en cerámica?

Durante el proceso de producción cerámica nadie quiere llevarse sorpresas, sino todo lo contrario: todos queremos que el producto final tenga las características esperadas. Y para ello necesitamos que las suspensiones, la base de todo producto cerámico, tengan las propiedades físicas y químicas deseadas y, además, que estas se mantengan estables durante todo el procedimiento. Por suerte, contamos con aditivos cerámicos que nos permiten modificar la reología de la suspensión a nuestro antojo. Unos de los más importantes, y que desgranaremos en este artículo, son los agentes defloculantes para cerámica.

Funciones de los agentes defloculantes para cerámica

Cuando hablamos de agente defloculante nos referimos a una sustancia que evita que se aglomeren las partículas de un sistema coloidal. Para ello, el agente defloculante puede actuar de tres formas diferentes: mediante intercambio catiónico, por repulsión estérica y por complejación.

Al evitar la aglomeración de las partículas, los defloculantes para cerámica también reducen la viscosidad y el límite de fluidez de la barbotina. Estos son dos de los parámetros reológicos más importantes en la producción de suspensiones cerámicas, por lo que la elección del agente defloculante es primordial.

Al contrario que ocurre con los dispersantes, los agentes defloculantes reducen la viscosidad de la barbotina al disminuir el tamaño de las aglomeraciones, permitiendo contenidos en sólidos más altos. Los dispersantes, en cambio, permiten trabajar de manera estable con contenidos en sólidos más bajos.

Beneficios de los defloculantes para cerámica

Debido a las materias primas usadas en el proceso de producción cerámica (especialmente la arcilla), los defloculantes son uno de los aditivos más importantes de esta industria.

En una suspensión las partículas de arcilla tienden a aglomerarse, por lo que es necesario añadir un agente defloculante que lo evite. Gracias a este, conseguiremos una suspensión estable y con los parámetros reológicos que deseamos.

Además, los defloculantes cerámicos también influyen en la concentración de las barbotinas ya que permiten aumentar su contenido en sólidos. Como resultado, obtenemos beneficios como un ahorro de energía y un aumento en el rendimiento de la producción. Esta reducción de los tiempos la podemos ver especialmente durante el proceso de molturación porque disminuyen los tiempos de molienda.

Tipos de defloculantes

Como hemos comentado, la elección del agente defloculante es un paso crucial y para tomar la decisión correcta deberemos tener en cuenta tanto la naturaleza de los sólidos sobre los que queremos que actúe como el vehículo en el que se encuentran.

Con tal de que nuestros clientes obtengan siempre una solución a sus problemas, en Zschimmer & Schwarz ofrecemos diferentes tipos de defloculantes, tanto en formato líquido como sólido y aptos para diferentes aplicaciones, como pavimento, revestimiento, vajilla, sanitario y más.

Defloculantes líquidos

Si necesitamos añadir un defloculante después de la molienda, debemos utilizar un defloculante líquido, aunque no están limitados a esta fase. También es habitual usarlos en el proceso de molienda de la pasta cerámica.

En Zschimmer & Schwarz tenemos una amplia gama de defloculantes líquidos, como DOLAPIX G 25 y PRODUKT EV 4953.

Defloculantes sólidos

Los defloculantes sólidos se presentan en formato polvo y se recomienda utilizarlos durante el proceso de molienda, especialmente en el caso de los esmaltes.

De entre la gran variedad de defloculantes sólidos que comercializamos, podemos citar nuestras referencias GIESSFIX G3 y PRODUKT KD 8040.

Conclusión

A la hora de elegir el tipo de defloculante, es especialmente importante conocer la composición mineralógica de las materias primas, ya que en función de ella cambiará la forma de actuar del aditivo cerámico.

Además, no solo debemos estudiar qué tipos de defloculantes funcionarán mejor en cada caso concreto, sino que también hay que ser extremadamente minucioso al elegir la dosis de aditivo. Esta debe ser exacta para obtener los beneficios del defloculante sin arriesgarnos a provocar problemas como una viscosidad excesiva, un límite de flujo muy alto o incluso una sedimentación rápida.

Por todo ello, los defloculantes para cerámica no se deben aplicar sin llevar a cabo pruebas de laboratorio previas en las que se estudien diferentes tipos de defloculantes y dosis. Por esta razón, en Zschimmer & Schwarz ponemos nuestros laboratorios a disposición de los clientes, ofreciéndoles una completa asistencia técnica y estudios personalizados, de forma que obtengan un producto a medida que resuelva las necesidades de su caso concreto.