27.04.2022 | Química y lifestyle
Qué es la cromatografía y por qué la has usado aunque no seas científico
Además de haber dado un vuelco a nuestro mundo en pocos meses, el coronavirus ha hecho que nos familiaricemos con términos científicos de los que antes ni siquiera habíamos oído hablar. A estas alturas, seguramente te habrás hecho más de un test COVID. Lo que quizás no sabes es que funcionan gracias a una técnica conocida como cromatografía.
Si has tenido la oportunidad de ver estos test en el laboratorio, te habrás encontrado con una tira de papel de filtro, impregnada con determinados compuestos químicos, en la que aparecerán diferentes colores cuando reaccionan con la sustancia que se quiere estudiar. A modo de resumen, así es cómo se lleva a cabo la cromatografía pero, si quieres conocer todos los detalles, te recomendamos qué sigas leyendo porque te explicaremos qué es la cromatografía y en qué consiste, además de darte algunos ejemplos de tu día a día.
¿En qué consiste la cromatografía?
Todos los tipos de cromatografía, sin importar si es de papel, de gases o en columna, tienen en común el mismo objetivo: separar los compuestos químicos de distinta naturaleza de una muestra y, así poder identificar sustancias, cuantificarlas y clasificarlas.
Para ello, todos los tipos de cromatografía contienen una fase estacionaria, que consiste en un sólido o un líquido que se queda fijo en la misma posición, y una fase móvil, que puede ser un líquido o un gas que corre a lo largo de la fase estacionaría.
Para comprenderlo más fácil, vamos a ver un ejemplo cotidiano: en un test de antígenos la fase móvil consistiría en la muestra de saliva mientras que la fase estacionaria sería la tira de papel impregnada de anticuerpos. Estos reaccionarán con los antígenos de la saliva, en el caso de que el paciente estuviera infectado, coloreando el papel.
Además, las pruebas cromatográficas también suelen incluir una zona de control, que verifica que la fase móvil ha impregnado la fase estacionaria por completo y, por lo tanto, el test se ha realizado con éxito. Para ello esta zona de control contiene una proteína que se enlazará con otra sustancia que forme parte de la muestra.
Tipos de cromatografía
Con el desarrollo de la tecnología las técnicas cromatográficas han ido evolucionando para poder combinar mezclas de distinta naturaleza. Por esta razón, podemos encontrar varios tipos de cromatografía, como la cromatografía de gases o la cromatografía en papel.
Los diferentes tipos de cromatografía dependen del estado físico de la fase móvil, de la tecnología utilizada y el soporte. Los más destacados son:
Cromatografía en papel
La cromatografía en papel pertenece a la categoría de “cromatografía de líquidos” y, al ser la que menos recursos necesita, es la más utilizada en laboratorios educativos. Su desventaja es que el proceso es más lento. Como su nombre indica, la fase estacionaria de la cromatografía en papel consiste en una cinta de papel situada en un recipiente y la fase móvil es un líquido.
Cromatografía en capa fina
La cromatografía de capa fina pertenece a la misma categoría de cromatografía que la cromatografía en papel. Sin embargo, se diferencia en que la fase estacionaria se compone de materia pulverizada como la alúmina, gel de sílice o celulosa y se encuentra sobre una superficie, generalmente una placa de vidrio o de aluminio. La ventaja frente a la cromatografía de papel se encuentra en su proceso, ya que es mucho más rápido.
Cromatografía en columna
La fase estacionaria de la cromatografía en columna suele ser gel de sílice, alúmina, sacarosa o almidón y la fase móvil, normalmente un disolvente o una mezcla de disolventes. La muestra, es decir, la mezcla a separar, se deposita sobre la columna de vidrio. Mientras, el soporte se llena de la mezcla de la fase móvil, haciendo que la muestra se desplace a distintas velocidades consiguiendo una separación que depende de la interacción de la muestra con la fase estacionaria y la móvil.
Cromatografía de gases
En el caso de la cromatografía de gases la fase móvil es un gas inerte, como por ejemplo el helio o el nitrógeno y la fase estacionaria puede ser o un sólido o un líquido “sostenido” por un sólido inerte. La cromatografía más utilizada se lleva a cabo con el gas líquido. En este caso, los componentes se separan cuando entran en contacto con el gas y un detector es utilizado para controlar la corriente de salida. Como ventaja de la cromatografía de gases destacamos su alto nivel de sensibilidad y exactitud en los resultados. Es por ello por lo que se utiliza para muestras complejas.
Ejemplos cotidianos de cromatografía
Ahora que ya sabemos qué es la cromatografía, podemos conocer algunos ejemplos de la vida cotidiana. La cromatografía es un proceso utilizado mucho más de lo creemos en nuestro día a día.
Un ejemplo lo podemos encontrar en los análisis de sangre. La cromatografía de muestras de sangre se realiza con la finalidad de identificar las sustancias contenidas en ella como puede ser alcohol, drogas o incluso para identificar las sustancias de las pruebas de dopaje. Lo mismo sucede con las muestras de orina o de saliva, ya que la cromatografía nos puede servir para detectar algunos residuos inusuales. Por ejemplo, la cromatografía es la técnica que se utiliza en los test de embarazo y, como hemos dicho más arriba, en las pruebas del coronavirus.
Además, la cromatografía de gases se utiliza para realizar pruebas forenses. Así se pueden encontrar muestras de ADN en un cuerpo o verificar si un incendio ha sido provocado, a través del análisis de los químicos responsables del incendio. También, lo utilizan industrias de bebidas para mantener la misma proporción de ingredientes en la fórmula y así garantizar la misma calidad en todos sus productos. Por último, se utiliza para conocer qué anticuerpos son más efectivos y así lograr neutralizar una enfermedad.
Como has podido ver, durante el paso de los años han ido apareciendo diferentes tipos de cromatografía, haciendo que esta técnica química haya llegado a sectores tan diversos como la sanidad, industrias de bebida o incluso a nuestras casas. Como decimos nosotros, ¡la química vuelve a estar presente en nuestro día a día!