01.09.2022 | Tendencias del sector químico
¿Qué necesitas para formular una crema emoliente?
Con la llegada de septiembre no nos queda otro remedio que ir despidiéndonos del verano y preparándonos para la llegada del frío. Nuestro cuerpo empieza a pedirnos fórmulas más ricas, que sean capaces de paliar los efectos de las bajas temperaturas, el viento y la humedad en nuestra piel. Así es como en esta época vivimos un auge de las cremas emolientes, ideales para hidratar la piel en profundidad.
En este artículo no solo te daremos algunos consejos y recomendaremos productos para formular una crema emoliente, sino que también explicaremos en qué consiste el efecto emoliente y para quién están indicados este tipo de productos.
Emoliencia: significado
La palabra “emoliencia” proviene del latín molliere, que significa suavizar y ablandar. Por eso cuando hablamos de productos emolientes en cosmética nos referimos a aquellos que suavizan y acondicionan la piel, además de reparar la función barrera del estrato córneo.
Los productos emolientes suelen ser ricos en lípidos. Estos se alojan entre las células del estrato córneo, allí donde han sido dañadas, y ayudan a reparar la piel y prevenir la pérdida de agua transepidérmica. De este modo, gracias a las cremas emolientes, la piel recupera su flexibilidad y está más suave e hidratada.
Tipos de productos emolientes
Hay una gran variedad de productos que provocan un efecto emoliente en la piel. Los puedes encontrar en diferentes formatos, desde líquidos a ceras, pueden ser tanto lipofílicos o hidrofílicos y de origen sintético o natural. La elección depende del producto que desees formular y de tus requisitos de formulación.
Además, las nuevas demandas y mayor exigencia de los consumidores impulsan la innovación en este campo, por lo que a menudo se desarrollan nuevos productos para cremas emolientes.
Nuestros productos para cremas emolientes
Una propuesta interesante para conseguir el deseado efecto emoliente son los ésteres. Se trata de productos muy versátiles, que, utilizados correctamente, aportarán a tu fórmula los efectos que desees.
En Zschimmer & Schwarz ofrecemos una amplia gama de ésteres emolientes, utilizados asiduamente en la formulación de geles, champús, acondicionadores, productos solares y más. En función de las propiedades que desees para tu crema emoliente, te recomendamos los siguientes productos:
- Si quieres formular una crema emoliente ligera, te recomendamos optar por ésteres emolientes con baja viscosidad, que se absorban rápido y sean fáciles de extender. Te proponemos nuestro ZETEMOL 99 (Isononyl Isononanoate) y nuestro ZETEMOL OSB (Diethylhexyl Sebacate). Estos productos te resultarán útiles para formular, por ejemplo, cremas faciales para pieles con tendencia acneica.
- Si, en cambio, buscas una crema emoliente para pieles secas, es preferible que optes por ésteres más viscosos y que se absorban lentamente. Dos buenas opciones son ZETEMOL 5418 (Pentaerythrityl Tetraisostearate) y ZETEMOL 2IS (Isostearyl Isostearate). La clave para evitar que el producto final sea difícil de extender es incluir en la fórmula también algún éster de baja viscosidad.
Productos emolientes en protectores solares
Por otro lado, si hablamos de emolientes no podemos dejar de mencionar su interesante relación con los protectores solares. Y es que algunos productos emolientes tienen la capacidad de solubilizar los filtros solares. Este es el caso de nuestro ZETEMOL OSB, del que te hemos hablado más arriba, que además de solubilizar los filtros orgánicos también ayuda a dispersar filtros minerales como el óxido de zinc. De este modo, actúa como un booster del SPF, optimizando la cantidad de filtro solar utilizado sin comprometer sensorialidad del producto final.
Otros usos de los ésteres emolientes
Como has visto, los ésteres emolientes abren un gran abanico de posibilidades, permitiendo a los formuladores enriquecer no solo las fórmulas de las cremas emolientes sino también la de productos de uso cotidiano como champús, acondicionadores, protectores solares, geles y maquillaje.
Aunque en este artículo nos hemos centrado en las cremas emolientes, no queremos cerrarlo sin comentar otros usos habituales de los ésteres emolientes y presentarte nuestros productos más recomendados para cada caso:
Productos emolientes en cosmética capilar
Algunos ésteres emolientes también son buenos acondicionadores capilares, por lo que son ideales para la formulación de mascarillas capilares. Además, existen muchas opciones para cosmética natural o con certificado Cosmos. Por ejemplo, este es el caso de ZETEMOL AL RSPO MB (Myristyl Lactate) o ZETEMOL MM RSPO MB (Myristyl Myristate). En ambos productos, el poder acondicionador lo aporta la cadena mirística C14.
Productos emolientes en cosmética de color
Otros ésteres tienen la capacidad de dispersar pigmentos, por lo que son productos idóneos para la cosmética de color. Si quieres incluir ésteres emolientes en la formulación de BB o CC creams, bases de maquillaje, sombras de ojos, pintalabios, etc. te recomendamos ZETEMOL 5418 (Pentaerythrityl Tetraisostearate) o ZETEMOL 512 (Isoamyl Laurate).
Ésteres emolientes en productos de aclarado
Por último, también podemos utilizar los ésteres emolientes en productos de higiene. Por ejemplo, ZETEMOL HE (PEG-7 Glyceryl Cocoate) es un éster soluble en agua que actúa como agente solubilizante y ZETEMOL AL RSPO MB (Myristyl Lactate) es un espesante adecuado para productos de higiene con y sin sulfatos.
Ya has visto que los ésteres emolientes ofrecen un gran abanico de posibilidades. Sin embargo, es importante conocer a fondo sus propiedades para saber cómo se van a comportar en la fórmula y así conseguir unos buenos resultados. No dudes en contactar con nuestro equipo técnico si quieres probar alguno de nuestros productos emolientes o necesitas ayuda para formular tanto una crema emoliente como otros tipos de cosméticos.