06.05.2021 | Tendencias del sector químico
Espesantes en cosmética: ¿cómo mejoran un producto cosmético?
Cuando hablamos de cosmética, no hay ninguna duda de que el producto debe aportarnos los beneficios que nos promete. Pero los cosméticos pueden ir más allá de su funcionalidad y hacer que el usuario realmente disfrute con su uso, fomentando así la fidelidad al producto. Para ello, el formulador debe cuidar la viscosidad y la textura del producto y asegurarse de que esta sea agradable, de fácil aplicación y adecuada al tipo de piel al que va dirigido el cosmético. Y para lograrlo unos de nuestros mejores aliados son los espesantes cosméticos, ingredientes que nos permiten dotar a los cosméticos de la viscosidad deseada e incluso conseguir diferentes texturas.
Espesantes cosméticos, viscosidad y textura
La viscosidad de un cosmético no solo es importante para garantizar la correcta aplicación del producto. Ocurre esto, por ejemplo, en los geles o champús, que necesitan tener cierta viscosidad o, de lo contrario, se nos escurrirían por las manos haciendo muy difícil su aplicación.
Esta propiedad también tiene un gran peso en cuanto a la sensorialidad de un producto cosmético e incluso a las emociones que asociamos con él. No es lo mismo una crema que meramente cumpla su función que una emulsión que nos proporcione una sensación agradable o incluso sorprendente e inesperada.
Yendo aún más allá, en los últimos años hemos asistido a innovaciones progresivas que han revolucionado el mundo de la química cosmética. Las nuevas posibilidades en cuanto a la creación de texturas innovadoras han hecho que los cosméticos nos ofrezcan mucho más que un producto efectivo y se conviertan en toda una experiencia sensorial.
Todo esto contribuye a que no elijamos un producto cosmético únicamente porque sea útil, sino porque este pasa a ser un momento deseado en nuestra rutina diaria. Ya sea un baño burbujeante, una crema que nos ponemos antes de dormir y que nos ayuda a relajarnos o un champú sedoso, los espesantes cosméticos son ingredientes que nos pueden ayudar a conseguirlo.
Factores que influyen en la viscosidad
La viscosidad depende de muchos factores, entre los que destacamos los siguientes:
- Combinación de tensioactivos
- Perfume elegido. Hay que estudiarlo muy bien porque algunos perfumes bajan drásticamente la viscosidad.
- Temperatura
Tipos de espesantes cosméticos
Hoy en día los formuladores tienen a su alcance numerosas opciones para mejorar la viscosidad de los productos cosméticos. Para empezar, existen tensioactivos que también funcionan como espesantes cosméticos, además de aumentar la cantidad de espuma generada y contribuir a su estabilización. Los más recomendados son las alcanolamidas como Cocamide DEA, Cocamide MEA o Soyamide DEA, que en Zschimmer & Schwarz comercializamos con los nombres de PURTON CFD, PURTON CFM/F y PURTON SFD, respectivamente.
También son útiles los electrolitos (sales) como el cloruro sódico, especialmente si se usan en bases que contienen alquiléter sulfatos (ej. Sodium Laureth Sulfate); o, si buscas espesantes naturales para cosméticos, probablemente te decantes por las gomas naturales como la goma xantana.
Otros espesantes cosméticos habituales son los derivados de la celulosa (ej. Carboximetil Celulosa), los polímeros (ej. Carbomer) y espesantes inorgánicos como los silicatos o la bentonita.
En función de su aplicación, desde Zschimmer & Schwarz te recomendamos los siguientes espesantes para cosméticos.
Espesantes para jabón de manos
Cuando la base tensioactiva contiene sulfatos, suelen utilizarse espesantes cosméticos clásicos y económicos, como Cocamide DEA y Sodium Chloride. En general estos espesantes son válidos para jabones de manos, geles de baño, champús y otros productos con aclarado que empleen una fórmula “clásica”, generalmente basada en sulfatos y Cocamidopropyl Betaine.
Espesantes para gel hidroalcohólico
Llevados por la necesidad de ofrecer a la población productos esenciales, durante la pandemia de COVID-19 muchos fabricantes de cosméticos han empezado a producir geles hidroalcohólicos, incluso aquellos productores que no los tenían en su catálogo inicialmente.
Como espesante para gel hidroalcohólico se suelen utilizar polímeros. Por ejemplo, uno de los más usados es el Acrylates/C10-30 Alkyl Acrylate Crosspolymer.
Espesantes para champú sin sulfatos
Los formuladores de productos sin sulfatos tienen verdaderos quebraderos de cabeza para obtener la viscosidad deseada, ya que los espesantes más comunes, como Cocamide DEA y Sodium Chloride, no suelen ser útiles. Una buena solución en estos casos es usar el espesante para cosméticos OXETAL VD 92 (Laureth-2 y PEG-90 Glyceryl Isostearate), apto tanto para cosméticos estándar como para productos sin sulfatos, y que da como resultado una fórmula final transparente.
Espesantes naturales para cosméticos
Debido a las limitaciones de ingredientes aptos para cosmética natural, en ocasiones es complicado para los formuladores obtener texturas especiales. Normalmente se utilizan gomas, que además permiten obtener una viscosidad funcional.
Sin embargo, si quieres dar un paso más y formular un producto “premium” te recomendamos probar ZETEMOL AL RSPO MB (Myristyl Lactate). Se trata de un espesante cosmético y acondicionador 100 % natural, con certificado Cosmos y RSPO. Junto al Ammonium Lauryl Sulfate y la Coco-Betaine permite construir una base tensioactiva con viscosidad adecuada para el desarrollo de fórmulas con elevado porcentaje de ingredientes de origen natural.
Espesantes para cremas y emulsiones
Por último, debemos destacar los espesantes para emulsiones, ya que en este caso es necesario diferenciar entre aquellos aptos para la fase oleosa de los que funcionan en la fase acuosa:
- Fase oleosa: lo más habitual es utilizar alcoholes grasos (por ejemplo el Cetearyl Alcohol), ceras y mantecas vegetales, ésteres como nuestro ZETEMOL MM RSPO MB (Myristyl Myristate) o ácidos grasos como el ácido esteárico.
- Fase acuosa: está muy extendido el uso de gomas (guar, xantana…), así como de Carboximetil Celulosa.
Como puedes ver, la variedad de espesantes para cosméticos es muy amplia y te permite obtener la viscosidad adecuada sea cual sea el producto cosmético que vayas a formular. Sin embargo, es importante conocer las peculiaridades de cada caso y poder superar los retos que tiene cada aplicación.